Los caballos salvajes, también conocidos como mustangs, trotan por el paisaje semiárido y remoto del Fifteenmile Herd Management Area en la cuenca de Bighorn. Defensores, ganaderos, ecologistas y el gobierno están buscando soluciones sobre cómo manejar los animales de la mejor forma posible y protegiendo estos ecosistemas desérticos, tan frágiles y vulnerables.